PROCESO

Y estoy seguro de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo. -Filipenses 1:6 NVI

A veces, nuestros hijos quieren una gratificación instantánea. Las cosas tienen que suceder ahora mismo. En nuestra era de mayor tecnología, todo está disponible con solo hacer clic en un botón, y cuando esto se convierte en la norma, proyectamos esta mentalidad en todos los aspectos de nuestras vidas sin siquiera pensar en ello.

Eso incluye nuestra relación con Dios y nuestra relación con nuestros hijos, nuestros deseos y necesidades muchas veces. Con solo ponerlo en tu carrito de compras y pagarlo ya lo consigues. Pero no es así en la vida real, recibimos un modelado, amasado, golpes, rociado de polvo…calor, etc como la masa de harina hasta convertirse en las manos del panadero en pan.

Es difícil encontrar historias en la Biblia donde una persona tiene un encuentro con Dios e inmediatamente se convierte en una persona completa o acabada.

Incluso el apóstol Pablo. Cuando Dios lo llamo, todavía estaba cegado temporalmente. Pasó por un proceso para convertirse en el hombre que Dios quería que fuera. Incluso después de mucho ministerio, Pablo todavía confesó sus problemas y áreas de crecimiento.

Debemos esperar que nuestras vidas sean un proceso. No son pasos de comida hecha para microondas. Así que no se sienta apurado o como si estuviera atrasado. ¿Estás donde finalmente quieres estar con Dios o con tu familia? Tal vez no, pero ¿estás hoy en un lugar diferente al que estabas ayer o hace un año? Espero que eso sea lo más probable.

Dios, ayúdame a ser paciente con el proceso y saber que me estás transformando para ser más como tu aprendiz siguiendo a su maestro.