Porque la locura de Dios es más sabia que la sabiduría humana, y la debilidad de Dios es más fuerte que la fuerza humana. -1 Corintios 1:25

Parece extraño leer acerca de la insensatez y debilidad de Dios. Pero lo que Pablo está tratando de ayudarnos a entender es que en todas las cosas y en todos los sentidos, Dios es mayor.
Vivimos en un mundo de “hágalo usted mismo” donde muchos de nosotros queremos resolver las cosas por nuestra cuenta. Pensamos que si pedimos ayuda, estamos admitiendo que somos débiles.
Este versículo nos recuerda que incluso en nuestro mejor y más fuerte logro, todavía no nos debemos a Dios. ¿No es alentador saber que Dios no solo es sabio y fuerte, sino que también está de nuestro lado?
Podemos acudir a él con confianza, sabiendo que él es más que suficiente para ayudarnos en cada situación en la que nos encontremos. Y de la misma manera, cuando alguien o nuestros hijos acuden a nosotros en busca de ayuda, podemos hacer todo lo posible para guiarlos señalándoles a Dios.
Dios, ayúdame a descansar en tu fuerza y tu sabiduría. Ayúdame a confiar en ti para que me ayudes y no tratar de lograrlo todo con mis propias fuerzas. Gracias por la sabiduría y la fuerza que con gusto compartes con tus hijos. Amén